Como es de conocimiento público, durante los años recientes, las iglesias que firmamos este comunicado, hemos venido trabajando de manera conjunta con el ministerio Casa de Oración México, con sede en la ciudad de Guadalajara y bajo la supervisión general del Pastor Chuy Olivares. Dicho vínculo ha sido hasta ahora una valiosa oportunidad para el aprendizaje, así como para encontrarnos y servir con otros hermanos y compañeros en esta “buena batalla de la fe”.
Sin embargo, y a causa de una nueva definición de sus condiciones para trabajar con ella, la Iglesia Casa de Oración México por vía de su concejo de pastores, ha tomado la decisión de desligarse de toda relación con cualquier ministerio asociado con la postura doctrinal comúnmente llamada calvinismo.
Si bien nuestras congregaciones no se definen como calvinistas, sino sencillamente como cristianas, es un hecho que nosotros creemos en la soberanía de Dios en la salvación, incluyendo aspectos como la incapacidad del hombre para buscar a Dios por cuenta propia, la predestinación de los salvos, la eficacia específica del sacrificio de Cristo, su llamamiento eficaz que conquista la voluntad humana, así como la preservación de la salvación a causa del puro poder de Dios, todo lo cual afirmamos, creemos y enseñamos por el sencillo pero rotundo hecho de hallarlo claramente expresado en las Escrituras.
Ante tales convicciones nuestras, invariablemente sustentadas en la Palabra, Casa de Oración México ha creído conveniente desfilar a nuestras congregaciones, así como excluir de sus páginas, de sus recomendaciones y hasta de sus transmisiones de radio a todo ministerio con el que había venido trabajando y cuya enseñanza tenga este mismo enfoque.
Por nuestra parte sostenemos que la unidad de la iglesia debe permanecer más allá de estas diferencias no esenciales, y que nuestra desafiliación de dicho grupo de iglesias no ha sido a causa de nuestro propio deseo ni de nuestra decisión, sino que se trata de una determinación altamente respetable del ministerio Casa de Oración México, al cual manifestamos, ahora y siempre, nuestra gratitud.
Nuestras congregaciones, ahora unidas por esta situación, continuarán con su trabajo de siempre, apoyadas en Cristo y firmes en la tarea de servir a Dios y a nuestros hermanos en la proclamación del evangelio y la edificación de la iglesia.
Compartimos ampliamente las palabras del Pastor Chuy Olivares al despedirse de nosotros, esperando “que el tiempo que convivimos haya sido de bendición para sus vidas” y extendiendo “un abrazo afectuoso sabiendo que Dios seguirá sosteniéndonos a todos con Su gracia”.
Pastores:
• Marvin Alpire (Casa de Oración Missio, Salta, Argentina)
• Luis Enrique Alvarado (Casa de Oración Nuevo Laredo, México)
• José Ignacio Arretxe (Casa de Oración Lasarte, País Vasco, España)
• Alfredo Corvera (Casa de Oración Navolato, México)
• Julián Hernández (Casa de Oración Los Mochis, México)
• Iván Llamas (Casa de Oración Patria Sur, Guadalajara, México)
• Luis Rodas (Casa de Oración Missio, Córdoba, Argentina)
• Héctor Urzúa (Casa de Oración Culiacán, México)
• Luis Walle (Casa de Oración Hefzi Bá, Guadalajara, México)
